El nuevo desafío para las escuelas es descubrir que una de las principales riquezas es la diversidad y la incertidumbre. Los educandos llegan con múltiples saberes adquiridos, con maneras diferentes de aprender, desde como realizan las acciones encomendadas, la forma en que interiorizan el mundo y modo de representarlo conforme sus esquemas de pensamiento y acción. Todo a raiz de la velocidad con la que cambia y avanza el conocimiento, que conduce a navegar por un mundo incierto. La pregunta ¿hacia donde se debe dirigir la escuela?. Es necesrio que esta abra las puertas a transformar las estrategias y su didáctica para enfrentar las diversas situaciones dificultades que se vayan a presentar, pues como se dice ya el educando no espera ir a aprender a la escuela para aprender, ya trae saberes que son el punto de partida para iniciarlos en nuevas construcciones cognitivas.
La educación presencial es la base para conducir al estudiante a aprender de muchas formas, pues es ahi donde se dan las grandes experiencias, es en el aula donde se pone en práctica la percepción, se trabaja la memoria, se desarrolla la inteligencia, se manifiestan las emociones, el alumno está en contacto con el profesor, sentir afecto por lo que hace, el profesor puede definir las estrategias que sean pertinentes, intuir las necesidades de éste, adecuar la información conforme sus capacidades, hacer comprender la complejidad de entender e interpretar el mundo.
Por lo tanto los que estamos dentro de la escuela, debemos rescatar la función que tenemos, la de mediar el conocimiento a través de experiencias de aprendizaje, para revolucionar los estados del saber. Necesitamos tener las competencias para dirigir a los alumnos para que aprendan a resolver los problemas de la realidad sin patrones obstaculizadores, dejar de guiarlos solo por un solo camino, a llevarlos a utilizar la reflexión como una condición para aprender, la cual tanto los profesores como los alumnos han de llevar a la práctica. Y es en el aula donde se nos presentan este tipo de alumno, por lo tanto no hay como la educación presencial para darnos cuenta de ello.
MCA. BLANCA ESTHELA FALCONE TREVIÑO
Reynosa, Tam., a 8 de octubre de 2015
En la redacción de este artículo tome apuntes de un curso de competencias del Instituto Tecnológico de Reynosa, promovido por la Secretaría de Educación Pública.
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